“Las mejores cosas de la vida están al otro lado de tu miedo máximo”

Esta semana he decidido crearme un canal de YouTube. Es una plataforma que desde bien pequeña me ha encantado. Te ofrece justo el tipo de contenido que es de tu preferencia, pero sabes que ahí también encontrarás de todo. Una herramienta que me ha servido tanto como para el entretenimiento y ocio, como para el aprendizaje en diversos ámbitos. El poder ofrecer todo esto, y compartir mis videos con cientos de usuarios, es algo que siempre me llamó la atención. 

Temáticas como estilo de vida, video blogs, viajes, moda o cosmética siempre me han gustado, y por mi cabeza siempre rondó la idea de sumarme a esta plataforma como creadora para poder hablar de todo ello. Además, la grabación y edición de estos vídeos, a pesar de ser un proceso largo en el que implicas muchas horas para unos minutos, es algo que me encanta. 

¿Y por qué me estás contando todo esto? Pues bien, lo hago por compartir con vosotros el motivo por el que he tardado tanto en dar este paso. Como todo en las redes sociales, cuando creas y subes contenido te expones a todo tipo de críticas, y comprendo que esto debe ser así, porque no a todo el mundo tiene por qué gustarle lo que haces. Aunque también soy de las que piensa que, si no tienes nada bueno que decir, mejor no digas nada. 

Pero para ser sincera, lo que me ha hecho plantearme durante años si dar o no dar ese paso ha sido el qué dirán. Ser de un pueblo pequeño seguramente tenga algo que ver con eso. A pesar de que en la mayoría de los ámbitos de mi vida eso no me ha frenado, parece que en este tema concreto era una traba importante. Reflexionando conmigo misma el otro día llegué a la conclusión de que si esto era algo que me hacía feliz y que me encantaría poder hacer, ¿por qué no iba a hacerlo tan solo por lo que fueran a pensar un puñado de personas?

En ese punto recordé un vídeo que había visto, precisamente en YouTube, hace algún tiempo. En él, Will Smith comentaba cómo había sido su experiencia de tirarse en paracaídas por primera vez. Habla de como en algunas ocasiones el miedo se puede apoderar de nosotros hasta tal punto de que nos condiciona en el día a día. En dicho vídeo dice una frase, que titula este vídeo, y que desde que la escuché me ha marcado, por la cantidad de verdad que atesoran un puñado de palabras: “Las mejores cosas de la vida están al otro lado de tu miedo máximo”. 

Os dejo la charla completa para que podáis disfrutarla, merece la pena. También, por qué no, os dejo el primero de los vídeos que he creado para mi canal. Espero que os gusten ambos. ¡Que vaya bien!

Tú eres quien crea el contenido de los medios

Hace ya varios meses que trabajo para un medio digital como es La Voz de Asturias. Desde que comencé allí he podido comprobar la cantidad de noticias de las que a diario se hace eco el mismo, algunas de las cuales se comparten en redes sociales, pero no todas. El criterio para decidir qué saldrá en redes y qué no basa principalmente en la experiencia de los periodistas del medio, que conocen a su lector y pueden intuir qué es lo que más leen.

Evidentemente esto no es una ciencia exacta, pero así funciona, ya que si se compartiesen todas las noticias que escribimos a diario, al estar en Facebook o Twitter como medio de comunicación se miran con lupa todos nuestros movimientos y provoca que el algoritmo que hace que nuestros lectores vean o no esas noticias en su perfil funcione mejor o peor. Dicho esto paso a la segunda parte. También desde la redacción se hace una selección de qué vamos a contar, y de nuevo son los lectores los que, a través de leer o no noticias similares, nos hacen saber qué es lo que les gusta leer. Bien, pues aquí entra una de las secciones más polémicas: VIRAL.

Dentro de esta categoría se agrupan noticias, en el caso del medio para el que trabajo, de famosos asturianos de cualquier índole, o temas que están teniendo mucha repercusión en redes sociales y guarden algún tipo de relación con el Principado. Estas noticias se comparten SIEMPRE en redes porque, tal y como hemos comprobado, son el tipo de noticias que más se leen a lo largo del día. Estas son a su vez las noticias que más comentarios negativos reciben en redes, ya no solo por el tema que tratan, sino por el simple hecho de ser contadas.

Son muchas las personas que se atreven a decir que se avergüenzan del medio por publicar estas cosas, que hay muchos temas más importantes de los que hablar, o tiran de ironía confesando que tras leerlo ya podrán dormir tranquilos. A toda esa gente tengo algo que decirles: si estas noticias existen es porque tú las lees. Pongo un ejemplo: a 18 de febrero, una información relacionada con el nuevo tatuaje de Fernando Alonso es la segunda noticia más leída del día, con 5.758 lectores y 53 personas dentro de la propia información a las 21:52 de la noche. Esta sería de esas que la gente en redes sociales considera “basura”. Otra noticia que habla sobre las nuevas plazas de empleo que Sespa ofrece, a la misma hora, ha sido leída 560 veces y está siendo leída por 12 personas. Esta última, es de las que nuestros lectores considerarían “importante”.

Con estos datos vengo a decir lo siguiente. Créanme cuando les digo que a nosotros nos gustaría escribir y contar más noticias como la última, pero son ustedes quienes nos hacen generar las primeras, ya que son las que, aunque lo nieguen, prefieren leer. Si dejan de leerlas, nosotros dejaremos de hacerlas. Espero que con esto, la próxima vez que decidan comentarle a un medio de comunicación en sus redes sociales que su trabajo es una porquería, se paren a pensar qué ha llevado a dicho medio a publicarlo.

Evidentemente, todo tipo de comentarios en relación con el contenido de la noticia o cualquier debate que se abra a través de los mismos es bien recibido, siempre y cuando se cumplan unas normas básicas de sentido común: lee la noticia antes de comenzar a teclear, que quedarte tan solo con la información del titular nunca es buena idea para comenzar una buena conversación. Pero esto último ya da para otro post, algo que ya comentaremos otro día. ¡Nos leemos!